La tarde anterior a tu visita llego a casa. Tengo muchas cosas que hacer y la excitación de la inminencia hace que me cueste concentrarme. Voy a preparar el escenario y me siento a tomar un café para repasarlo todo. Seré Valeska recibiendo a Kerem, y pienso en lo que deseo de ti, en lo que te hace especial para mi. Eres un hombre atractivo y sensual, desprendes erotismo y el hecho de imaginar que te someteré a mis caprichos y que obedecerás mis órdenes me estremece. Siento una contracción en mi vientre que hace que me humedezca, y anoto en mi lista de deseos lo primero que quiero de ti: sentir tu lengua en mi entrepierna, lamiendo mi sexo. Eso lo harás con tu collar de perro puesto, por supuesto, Sé que Kerem también lo quiere así. Pero eso no me basta, Te quiero de rodillas y con las manos atadas a la espalda. Voy a ser yo quien decida en que momento te vas a acercar a mi y empezarás a complacerme. Me situaré frente a ti y abriré las piernas mostrándote mi coño deseoso. Te mantendré a poca distnacia y me acariciaré suavemente. En cuanto moje mis dedos te los introduciré entre los labios y te ordenaré que los chupes y que saborees mis jugos, y tiraré de la correa para amorrarte a mi.
"Cómeme perro....hazme estallar de placer en tu cara y no te retires hasta que no hayas lamido todos mis jugos".....y pondré los pies en tus hombros para mantenerte unido a mi. Me acariciaré los pechos y el torso, pasaré las manos por tu pelo y diciéndote "no pares" me pellizcaré los pezones deseosos de tus labios. Veo como mi cuerpo se tensa y tiro de la correa mientras con los pies te pego a mi. Lames, sorbes, muerdes, besas...y vuelves a empezar. "Así, perro, así... no pares"... y noto como todo mi cuerpo se contrae. Tú sigues con el ritmo, tu lengua recorre mi sexo y succionas mi clítoris hinchado sin pausa y sin prisa...a conciencia, como sólo tú sabes... hasta que exploto de placer. Me relajo sin dejar la correa, y tú, obediente, sigues lamiendo.....
Se me a humedecido de gusssstooo.excelente relato
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